Hoy día se me sigue complicando la lectura de la letra manuscrita, aunque no tanto como cuando pequeña mi madre escribía algún recado con dicha letra y yo como un analfabeta no tenía ni la menor idea de lo que quería decir.
¿Qué cambió? YO tuve que enseñar (y aprender) a mi hija a trazar semejantes letras una y otra vez, sigo sin poder hacerlas correctamente pero al menos ya puedo leerla. Supongo que pasa lo mismo con las ideas revolucionarias por una parte y por otra las optimistas que escucho a diario en las noticias respecto a la situación actual de mi país. Es verdad que México es un pandemonium y requiere urgentemente una limpia, pero también es cierto que es un país divino que ofrece mil y un esenarios maravillosos (apesar de las sequías y lluvias torrenciales y otros catástofes naturales) que dan alimento a quien los mira.
Me parece que el único defecto de México es que está plagado de "mexicanos" sin amor propio. Lo único que me queda es seguir intentando la letra manuscrita a lado de mi hija para que yo deje de ser menos analfabeta y ella logre tener bonita letra.
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